Louis Vuitton siempre está a la vanguardia de la moda y sobre todo de las temporadas. Para esta ocasión, quiso consentir a la mujer, como lo hace siempre, con una colección transición, entre verano e invierno, llena de novedades. Claro está, sin perder la elegancia que caracteriza a la marca.
Para esta ocasión
Louis Vuitton presentó prendas llenas de volúmenes redondeados, muchos tejidos opulentos y, como es costumbre, bastantes adornos de lujo. En esta línea, inspirada en la arquitectura, integra detalles de fuerzas armadas y militares con cuadros de tinte masculino, manteniendo y distinguiendo la parte femenina y, sobretodo, prácticos que caracterizan a la marca.
Una de las compañías que mejor uso estético da a las pieles, es Louis Vuitton, y para esta oportunidad viene con tonalidades otoñales. Muchos de los expertos en moda señalan a esta apuesta como un reencauche de colecciones anteriores, sin embargo, acá podemos observar cuellos de piel, hebillas en los bolsillos y uno que otro cierre deportivo, que le dan un aporte renovado.
Si hay algo que cautiva a las mujeres y en especial a las amantes de Louis Vuitton, es el calzado, el cual viene con tacones de primavera y verano llenos de toques y diseños inspirados en los años 50, donde las punteras y el minimalismo se roban el protagonismo. Las pieles también juegan un rol muy importante en los zapatos. Adornos opulentos y extravagantes, son una apuesta fiel al sentido estético de la compañía.
Para acompañar y a la vez proteger los ojos del sol de otoño, Louis Vuitton impone unos lentes plegables que, gracias a la capacidad de girar, se puede llevar como collar. Otros accesorios que la marca presentó en su colección pre fall, fueron boinas de cuero con tachuelas o estampados de leopardo.
Esta colección está llena de lujo, elegancia y, sobretodo,estilo. Como siempre, Louis Vuitton presentó los looks simples, donde las prendas cómodas y sofisticadas son las protagonistas.