Desde hace unos años nuestro mundo digital ha ido llenando todos los espacios de nuestra vida codificando un nuevo lenguaje a través de la imagen de la estampación digital.
Las acciones se volvieron íconos
Nos auto-descubrimos día a día bajo el lente de nuestro Smartphone. Aplicaciones como Instagram nos invitaron no solo a viajar a través del tiempo sino a desarrollar al fotógrafo que hay dentro de cada uno de nosotros.
Estamos en una época donde la nitidez de la virtualidad se confunde con la realidad y los procesos de estampación no han sido ajenos a esto. Quienes estamos en la industria de la moda, encontramos, no solo en el color, las texturas y las siluetas, medios para comunicar una idea sino en la estampación, el lenguaje más directo para materializar los conceptos creativos de nuestras marcas.
Hemos visto cómo la industria ha pasado de tecnología plana y rotativa cuya cantidad de colores es limitada. A tener modernas impresoras digitales que nos permiten plasmar cualquier archivo gráfico que necesitemos con una fidelidad fotográfica. Esto para un diseñador es como tocar el cielo con las manos. Flexibilidad es otra de las grandes ventajas. Este método de estampación permite metrajes mucho más reducidos que los que se debieran programar si habláramos de tecnología rotativa y plana.
Hay que tener precauciones, pues no solo se trata de estampar sino de saber el uso que se le dará a esta tela para pedir a los proveedores las respectivas garantías según se requiera. Por ejemplo, si estampamos telas para vestidos de baño, estas deben contar con colorantes y procesos de acabado adicionales que nos garanticen que el color va a permanecer al estar en contacto con el agua de mar o de piscina, al sol y a todos los agentes adicionales como protectores solares y demás.
¿Dónde podemos encontrar todo esto?
Pues bien, ¡¡en Lafayette Fashion contamos con esta tecnología de vanguardia para varios universos de vestuario. Y, con un equipo de diseño y comercial que te asesorará para que el único límite sea tu imaginación!!
